Para muchas personas las pulseras cuantificadoras se han convertido en dispositivos muy populares y no solo para aquellos que hacen deporte, sino que también para los que buscan mejorar su actividad física diaria, mediante recordatorios y logros que animen a realizar tareas sencillas.
Estos productos están equipados frecuentemente con sensores de frecuencia cardíaca, uno de los elementos cruciales para el entrenamiento de un deportista que le puede ayudar a comprobar los límites a los que puede estar durante su actividad física, pero cuando se pone en tela de juicio la precisión de estos sensores es cuando surgen los problemas, es por eso que es necesario saber cómo funcionan y saber si ofrecen información confiable para poder fiarnos en sus resultados.
LA COMPETENCIA ES DURA.
Actualmente la empresa de referencia en el sector de los wearables es Fitbit: IDC público un estudio hace poco en el que se muestra que la cuota de que ocupa en este mercado es del 43,9% mientras que xiaomi, Garmin o Samsung se acercan con resultados similares. Claro sin contar con el Apple y su reloj inteligente con función de cuantificado, del cual no pudieron obtener datos.
Aparte hay también otra importante porción del mercado que sigue estando dividida entre los demás fabricantes, “Others” -en la tabla- en la que se encuentran fabricantes como: Misfit, Mio, Microsoft, Polar, Under Armour e incluso Tom Tom, los cuales tienen menor relevancia, pero también aportan ofreciendo sus soluciones.
TODAS EN EL PUNTO DE MIRA.
El problema en los dispositivos de este tipo es que la precisión de sus sistemas para medición de frecuencia cardíaca no es buena. Lo cual a causado que por ejemplo en el caso de Fitbit, se le haya puesto una demanda a la empresa por publicidad engañosa, esto por asegurar que la precisión de sus sensores era rigurosa.
Yes, this chicken breast appears to be performing some vigorous exercise… pic.twitter.com/fY1cPSlCLM via @EmilyGorcenski
— Internet of Shit (@internetofshit) January 26, 2016
En la demanda se indica que la precisión de esa medición es crítica para para entrenamientos físicos intensos, sobre todo en el caso de los deportistas profesionales que se toman muy en serio este tipo de prácticas físicas. El uso de un dispositivo que ofrece mediciones inexactas, podría llevar a sufrir graves consecuencias, argumentan los demandantes.
Según estudio llevados a cabo por atletas en los dispositivos Fitbit, mientras los comparaban con otros dispositivos que dependían o no de sensores en el torso, se llegó a la conclusión que la lectura de la tasa de frecuencia cardíaca podía llegar a ser entre un 20 y 50% menor en los dispositivos Fitbit.
LAS BANDAS PECTORALES, MÁS PRECISAS.
Hay casos en los que es más recomendable acudir a soluciones más precisas y donde además hay que tener especial cuidado con esas mediciones, ya que como comentábamos esas cifras nos pueden exponer a el sobreesfuerzo (si miden menos pulsaciones de las reales) que posteriormente provoque problemas más graves.
Para estos casos las bandas pectorales tienen la ventaja, y es por qué aportan mayor precisión. La colocación en el pecho favorece la medición porque en esta zona hay menos huesos y tendones y por el contrario hay más tejido que en las muñecas, donde obtener precisión en las medidas es más complejo.
Pero además las bandas pectorales hacen uso de electrodos -en este caso es bueno mojarlos (¡incluso lamerlos!) para mejorar la conductividad-, los cuales hacen que el funcionamiento de estos sistemas sea más sencillo: cuando el corazón late, se envía una pequeña señal eléctrica a los músculos del corazón que causa una contracción, un latido. Se puede detectar esa señal eléctrica a través de la piel mediante los electrodos, y al recibirlos el microprocesador de estas bandas monitoriza y calcula la frecuencia cardíaca.
Ya para terminar, hay algo claro: sabemos que con el pasar del tiempo las pulseras cuantificadoras y sus sensores de frecuencia cardíaca van a ser cada vez más precisos, -esto no quiere decir que no exista margen de error- aunque es posible que para la mayoría de usuarios de estos dispositivos sea suficiente, pero aun así, si necesitas mayor precisión ya sea porque entrenas en actividades con intervalos de esfuerzo muy acusados o eres exigente, la banda pectoral puede ser tu mejor aliada.
Fuente: xataka