El radiotelescopio ultrasensible MeerKAT, situado en Sudáfrica, ha revelado una nueva imagen sin precedentes del centro de la Vía Láctea, en esta imagen se aprecian casi 1.000 misteriosos filamentos, inexplicablemente colgados en el espacio.
Según nuevas observaciones de radio realizadas con el radiotelescopio MeerKAT en el Observatorio de Radioastronomía de Sudáfrica (SARAO) en la provincia del Cabo Norte del país al centro de la vía láctea se han dado cuenta que existen diez veces más filamentos magnéticos de lo que se pensaba, que revelan que los astrónomos estaban observando solo una pequeña fracción de estos filamentos: hay al menos 10 veces más de lo que se sabía anteriormente.
Aunque la existencia de los desconcertantes y largos hilos unidimensionales (o filamentos) magnéticos –que se componen de electrones de rayos cósmicos que giran en el campo magnético a una velocidad cercana a la de la luz– alrededor del centro de nuestra galaxia ya había sido descubierta hace aproximadamente 35 años, su origen sigue siendo un misterio sin resolver desde entonces.
Los largos hilos unidimensionales, algunos se extendiendo hasta 150 años luz de diámetro, fueron descubiertos por primera vez por astrónomos de la Universidad Northwestern a principios de la década de 1980, pero gracias a las nuevas observaciones no solo han comprobado que hay muchos más, sino que están muy bien organizados, aparecen en pares y grupos y algunos están espaciados uniformemente como las cuerdas de un arpa.
¿Qué son y qué función tienen?
Según los expertos y nuevos avances en este tema está relacionado con las hipótesis de sus orígenes; el nuevo estudio descarta, por ejemplo, que un remanente de supernova, hallado con los nuevos datos, sea el probable progenitor de los filamentos. Por su parte, es más probable que los filamentos estén relacionados con las burbujas de radio descubiertas en 2019 con datos anteriores del MeerKAT en el centro de la Vía Láctea.
“Hemos estudiado filamentos individuales durante mucho tiempo con una visión miope. Ahora, finalmente vemos el escenario general: una vista panorámica llena de una gran cantidad de filamentos. Solo examinar unos pocos filamentos hace que sea difícil sacar una conclusión real sobre qué son y de dónde provienen. Este es un hito en la mejora de nuestra comprensión de estas estructuras”, explica Yusef-Zadeh, autor principal del artículo que publica The Astrophysical Journal Letters.
Yusef-Zadeh expone claramente lo que supone este nuevo hallazgo en el corazón de la galaxia: “Si fueras de otro planeta, por ejemplo, y te encontraras con una persona muy alta en la Tierra, podrías asumir que todas las personas son altas. Pero si haces estadísticas de una población de personas, puedes encontrar la altura promedio. Eso es exactamente lo que estamos haciendo. Podemos encontrar la fuerza de los campos magnéticos, sus longitudes, sus orientaciones y el espectro de radiación”.
