El 25 de octubre de 2001 nacía Windows XP, el sistema operativo que con los años (y con algún que otro Service Pack) se convertiría en un verdadero exitazo para Microsoft.
La empresa dejó de dar soporte a Windows XP en 2014, pero eso parece que no ha importado: su cuota de mercado, aunque baja, sigue siendo sorprendente, y si no que se lo pregunten a los Armenios: solamente el 53,5% de sus computadoras siguen usando dicha versión según StatCounter.
En Armenia Windows XP se usa cada vez más
Los datos de StatCounter GlobalStats arrojan que la cuota actual de Windows XP es del 0,69% a nivel mundial: no está muy lejos de la que tienen Windows 8/8.1, y dado que según Microsoft hay 1.300 millones de dispositivos ejecutando Windows 10 (cuya cuota actual es de casi el 78%), las matemáticas nos dicen que hay unos 12 millones de equipos en todo el mundo con Windows XP funcionando.
Lo curioso es que hay países en los que el uso de Windows XP es muy alto. El caso más sorprendente es el de Armenia, cuya cuota de mercado de Windows XP es al día de hoy del 53,5% de acuerdo a StatCounter. Esa cuota es mucho mayor que la de Windows 10 (32,8%) en el mismo país, y también supera de largo a la de Windows 7 (11,97%).
Algo raro ocurre en ese país, porque esa cuota de Windows XP de hecho no ha ido bajando con los años, sino que ha ido en aumento. Así lo revelan tuits que precisamente ya destacaban ese curioso dato en años previos. En noviembre 2018 la cuota era del 30%, en diciembre de 2019, del 41%, y en junio de 2020, del 43,44%. Realmente increible.
Razones que explican que Windows XP se siga usando
Lo cierto es que la situación de Armenia es absolutamente extraordinaria y no parece haber explicación clara para esa cuota de mercado que no para de subir: quizás haya un problema con los sistemas de medición de StatCounter en esa región, pero aún descartando ese caso lo cierto es que hay escenarios en los que usar Windows XP tiene una explicación clara.
La más común es la de sistemas que precisamente dependen de viejos sistemas operativos para funcionar correctamente. Hay aplicaciones que fueron diseñadas específicamente para funcionar en Windows XP y que posiblemente existan conflictos con nuevas versiones: eso hace que ni siquiera con las opciones de compatibilidad que ofrecen modernas ediciones de Windows se puedan resolver esos problemas.
Lo comentaban varios usuarios de Slashdot. Uno de ellos contaba cómo trabaja en un laboratorio que analiza cometas: el software de hecho estaba «ligado» a Windows 95 y no había forma de usar esa herramienta en otro sistema operativo que no fuera ese: siguen teniendo un ordenador específicamente para eso.
Ese mismo investigador contaba como ese laboratorio cuenta con una cámara microscópica que estaba diseñada para funcionar con Windows XP: nunca hicieron controladores para Vista o Windows 7 y acabaron usándola en este último sistema operativo, pero «apenas funciona» con esa versión.
Otro usuario contaba como su estudio musical seguía funcionando en un viejo PC de IBM con Windows XP, un par de tarjetas de audio PCI y una antigua versión de Reaper: «no lo conecto a internet y no instalo nada ni lo actualizo. A diferencia de una instalación típica de Windows, no se ha ralentizado a lo largo de los años».
Esa dependencia de hardware que solo funciona con viejos controladores para viejas versiones de Windows como XP es más común de lo que parece, y aunque los usuarios finales tienen mucha más libertad para «dejar atrás el pasado» y comprar nuevos dispositivos, hay aplicaciones y sistemas que dependen de que esos dispositivos antiguos sigan funcionando.