Los carritos de compras son una parte casi inevitable de cualquier viaje de compras. Entras a una tienda para agarrar algunas necesidades y te encuentras empujando, tirando, levantando y/o arrastrando tu carrito por el pasillo de productos horneados mientras una rueda con vida propia chirría y se detiene contra el linóleo.
Una leyenda urbana de larga circulación sostiene que los minoristas hacen los carros difíciles de maniobrar a propósito para ralentizar tu recorrido por el pasillo, con la esperanza de desviar tu atención hacia más mercancía. Pero la frustración nacional no es obra de un genio de la psicología empresarial.
Las famosas ruedas combativas son en realidad el resultado de los golpes repetidos a los que los carritos de compras suelen estar expuestos, explicó Alex Poulos, director de ventas de R.W. Rogers, proveedor de miles de carritos de compras a empresas como Whole Foods, Tractor Supply Company y Meijer.
Los carros de supermercado son más propensos a tener ruedas defectuosas que otros tipos de minoristas, como tiendas de ropa o farmacias, donde los carros no salen tanto de la tienda; la mercancía se suele llevar en una o dos bolsas. Esto se debe a que están expuestos a los elementos con mucha más frecuencia, y ese daño ambiental afecta a las ruedas. Sin embargo, el principal culpable suele ser no la rueda en sí, sino la forma en que está unida al carro.
Con el tiempo, jalar carros por estacionamientos irregulares, luchar con ellos al atravesar el umbral de las puertas dentro y fuera de la tienda, y forzarlos arriba y abajo de la acera deforma la placa giratoria, la pieza metálica que une el mecanismo de la rueda al cuerpo del carro, según Poulos.
«Si esa placa giratoria se tuerce un poco, puede levantar la rueda, y entonces ambas ruedas no tocan el suelo al mismo tiempo», explicó.
En un mundo perfecto donde los carros fueran manejados con cuidado y utilizados solo en interiores, la rueda estándar de poliuretano de cinco pulgadas de los carritos de compras podría durar entre seis y ocho años, según Alvar Diaz, vicepresidente de Ventas y Marketing de la empresa fabricante de ruedas y placas giratorias P&H Casters. En un entorno de tienda abierto las 24 horas, es más probable que duren dos o tres años, mientras que las ruedas metálicas duran alrededor de cinco.
Pero reemplazar la rueda sin prestar atención a la placa y los pernos que mantienen todo unido significa que una nueva rueda puede ser igual de tambaleante que una vieja.
Los consumidores comparten parte de la responsabilidad por las cualidades deterioradas y rotas de sus carritos de compras.
Los carros abandonados afuera después de que los compradores cargan sus alimentos en sus vehículos están a merced del calor extremo, la nieve, el hielo y la sal de carretera. Esta exposición prolongada puede dañar el carro y sus ruedas.
Para combatir esto, los minoristas de comestibles en Europa, como Aldi, Tesco y Lidl, tienen cerraduras en sus carritos que funcionan con monedas. Los clientes insertan una moneda para «alquilar» un carro, que recuperan al devolver el carro a su lugar original al final de su compra.
Este sistema, aunque no es común en los Estados Unidos, asegura carritos mucho más duraderos y menos ruedas tambaleantes.
«Las cerraduras con monedas aseguran que los carros estén siempre donde deben estar», dijo Poulos. «Garantizan que los carros se mantengan mejor y que su longevidad sea mayor porque no están en un banco de nieve o volcados por el viento. Además, no se necesita empleados que los busquen y los devuelvan al frente de la tienda».
Una forma de mejorar la durabilidad es cambiando el material de las ruedas del típico poliuretano a la goma más costosa.
Las ruedas de goma han sido un elemento básico de los carritos de compras motorizados durante décadas, según Beth Thieme, presidenta y directora ejecutiva de Amigo Mobility, que produjo el primer carrito motorizado en 1968.
Un paseo suave y estable es absolutamente necesario para estos carros utilizados por clientes con problemas de movilidad. Por lo tanto, estos carritos usan ruedas de goma sin placas giratorias, lo que significa que no pueden girar o atascarse.
Minoristas y fabricantes han tomado nota de este diseño. Varias cadenas importantes como Walmart y Target han comenzado a usar ruedas de goma en sus carritos.
Aunque las ruedas de goma cuestan el doble que las estándar de poliuretano, Diaz dijo que las ruedas de goma natural de P&H Casters pueden durar aproximadamente una década, excluyendo los malos tratos de los clientes. En un entorno de tienda más concurrido, pueden durar entre cuatro y cinco años.
Sin embargo, muchos minoristas eligen piezas más baratas porque el precio inicial suele ser más alto para un material más duradero, agregó Poulos. Estas empresas terminan necesitando reemplazar estas piezas más a menudo, ya que se tuercen y deforman, pero estas tareas, al igual que los carritos, a veces se pasan por alto.
