El origen de la velocidad de transmisión se da a finales de 1960, cuando EE.UU desarrollaba un experimento para el Departamento de Defensa del país. El resultado, se le denomino ARPANET y la velocidad con la que transmitía la información era de 56 Kbps.
De ARPANET a la fibra óptica
En aquellos tiempos ya se contaba con la primer banda ancha en Estados Unidos, y ese sería el modelo que pronto se expandiera a nivel mundial: redes cada vez más amplias que permiten una velocidad de conexión cada vez mayor. Así es como se pasó del módem al ADSL, que su principal característica era la velocidad de transmisión, además de que las llamadas telefónicas ya no interrumpían la conexión.
La migración por el momento fue a la fibra óptica: una tecnología que permite transmitir información enviando señales de pulso de luz en forma de ondas electromagnéticas, con interferencia muy baja en comparación con la tradicional conexión eléctrica con cables de cobre.
Un grupo de investigadores del Instituto Nacional de Información y Tecnologías de las Comunicaciones (NICT) en Japón, a través de un comunicado anunciaron que acaban de romper su propio récord de velocidad mundial de Internet, la velocidad anterior fue de 178 terabits por segundo (Tb/s), este record fue obtenido por los investigadores japoneses junto con ingenieros del Reino Unido en agosto del 2020.
El record que se acaba de romper es el doble de velocidad, consiguiendo los 319 Terabits por segundo (Tb/s), esta velocidad se pudo conseguir gracias a una avanzada tecnología de fibra óptica que es producto de un desarrollo de laboratorio, esta fibra óptica consta de cuatro núcleos y no sólo de uno como el que actualmente usamos, ocupando prácticamente el mismo tamaño de una línea estándar.
Esta tecnología permitió la reducción de la distorsión en la señal en transferencias de largas distancias, realizando experimentos que simulaban una distancia de 3.001 kilómetros de fibra óptica, enviando datos mediante láser y amplificadores de señal.
El grupo de investigadores consideran que el verdadera logro radica es la tecnología del nuevo cable óptico de cuatro núcleos que al tener un tamaño similar al cable actual, podría utilizarse con los actuales sistemas y darle un gran empuje a las velocidades actual. Bien sabemos que esta tecnología no se implementará de un día para otro, pero debemos contemplarlo como una posible evolución a los servicios de comunicación por cable.
