A mediados del año vimos un montón de noticias relacionadas con el Galaxy Note 7, desgraciadamente estas no eran a favor del nuevo equipó, más de un usuario reportaba que su Note había explotado. Alguno de los casos más sonados fue donde un Samsung Galaxy Note 7 exploto en la habitación de un hotel en Australia llevándose consigo unos 1.383 dólares en gastos. O cuando exploto otro equipo en una cafetería, se pudo captar el momento exacto en video por las cámaras de seguridad del lugar.
Todo esto genero una oleada de memes:
A pesar de que Samsung quiso darle una solución a este problema, según el WSJ la compañía ha decidido descontinuar las ventas del teléfono de manera permanente después de nuevos casos de explosiones en terminales reemplazados.
Más informacián: Gizmodo